jueves, 10 de noviembre de 2011

SIGNIFICACION Y ACTOS DE HABLA

UNIVERSIDAD DISTRITAL FRANCISCO JOSÉ DE CALDAS
Facultad de Ciencias y Educación
Proyecto Curricular de Especialización en Infancia, Cultura y Desarrollo

SIGNIFICACIÓN Y ACTOS DE HABLA

Alicia Rey

¿Qué es la significación?

Los avances producidos en los estudios lingüísticos señalan la necesidad de dejar de considerar la lengua como un instrumento "neutro" destinado únicamente a trasmitir información, para empezar a apreciarla como una actividad entre unos protagonistas llamados enunciador (o emisor o hablante) y destinatario (o receptor o alocutario, u oyente). En la base de esa actividad se halla la enunciación,  definida como el acto individual de utilización de la lengua y el enunciado, resultante de esa utilización.

Durante la realización de esa actividad lingüística, el enunciador toma posición en relación con su destinatario, con su misma enunciación, con el enunciado producido, con el mundo que habita y con los enunciados anteriores y los que vendrán posteriormente. A lo anterior se agrega también, que esa actividad lingüística deja unas marcas que se reflejan en la estructura del enunciado.

Los estudios sobre la enunciación han incidido notablemente en el cambio del punto de vista tradicional sobre la significación; posición defendida por los seguidores de Ferdinand de Saussure, quienes la veían como el resultado de un juego complejo de relaciones y de oposiciones internas al sistema de la lengua (valor semántico de una unidad lingüística), cuya especificación se hace de conformidad con los principios clásicos del análisis estructural (segmentación, permutación, conmutación, etc.).

Los estudios sobre la enunciación, especialmente de E. Benveniste y de los filósofos del lenguaje como J.Austin Y J. Searle, lograron que la significación pasara a ser concebida no de manera interna sistema de la lengua sino en referencia a las condiciones de utilización del enunciado; es decir en relación con su valor  pragmático, o sea en función del contexto en el cual el enunciado es proferido.

Teniendo en consideración tal posición pragmática, se puede afirmar que cuando observamos lo que hacen las personas cuando usan el lenguaje, nos encontramos con las intenciones, los propósitos,  las creencias y los deseos que el hablante tiene al usar la lengua. Es decir, nos encontramos con los actos de habla.

¿Qué es un acto de habla?
¿Qué es lo que caracteriza a los actos de habla que los hace diferentes de la mera emisión de sonidos? Lo característico es que al hablar el hablante quiere decir algo con lo que dice y de la cadena de signos emitida,  se afirma que tiene un significado. Dicho en otros términos (Grice, 1975): " Al hablar intento comunicar  ciertas cosas al interlocutor, haciéndole que reconozca la intención de comunicar  precisamente esas cosas. Obtengo  el efecto esperado en el interlocutor si logro  que reconozca esa intención de producir sobre él ese efecto  y una vez que mi interlocutor reconoce esa intención, se logra, en general,  el efecto que se pretendía". De esta afirmación se deduce que existe una estrecha relación entre significado e intención pero además, al realizar un acto de habla yo trato de comunicar algo a mi interlocutor y para ello hago que él  reconozca mi intención de comunicárselo.

Pero el significado tiene además, que ver con las convenciones o reglas que gobiernan el uso de la lengua. Así por ejemplo, cuando digo "Hola", ¿qué sucede en términos de la significación?: consiste en:
(a) intentar que el interlocutor reconozca que está  siendo saludado,
(b) intentar hacer que éste reconozca que está siendo saludado, haciéndole que reconozca la intención que se tiene de saludarle,
(c) intentar hacer que reconozca la intención que se tiene de saludarle, en virtud de su conocimiento del significado de la oración "Hola".

Esta manera de abordar la significación permitió abandonar de una vez por todas, la idea según la cual el sentido de los signos lingüísticos y de los enunciados se reduciría a su contenido representativo y podría ser considerada independientemente de su utilización en las posiciones discursivas de sus usuarios.

A partir de la pragmática, se considera que además de la función de representación, la lengua tiene un valor pragmático que puede ser estudiado mediante la teoría de los actos de habla; esta teoría sitúa el análisis de la lengua y de la significación en la utilización del lenguaje, comparando la acción de hablar con otras acciones  realizadas por los seres humanos.

Así por ejemplo, todo enunciado, además de referirse aún contenido, realiza una serie de  actos en relación con su interlocutor, por ejemplo: actos de preguntar, prometer, amenazar, etcétera. Cada interlocutor está obligado a reconocer en cada enunciación de qué tipo de acto se trata y comportarse de la manera apropiada según las circunstancias comunicativas.

La teoría de los actos de habla

J.Austin inicia el estudio de los actos de habla a partir del estudio de aquellos enunciados cuya enunciación por sí misma  constituye la acción; son los enunciado llamados performativos, (de performer: efectuar), que no describen la acción sino que son una acción. Por ejemplo: "yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo..." cuando el sacerdote derrama el agua bautismal, "Los declaro marido y mujer " pronunciado en la ceremonia de un matrimonio o "Dejo mis bienes a mi hijo "cuando se lee un testamento.
La constatación de la existencia de tales enunciados llevó posteriormente a J. Searle (1990) a desarrollar la idea fundamental para la comprensión de la comunicación humana según la cual:
"Una teoría del lenguaje forma parte de una teoría de la acción, simplemente porque hablar un lenguaje es una forma de conducta gobernada por reglas (...). La unidad de la comunicación lingüística no es, como se ha supuesto generalmente, el símbolo, la palabra o la oración, sino más bien la producción o emisión de ese símbolo, palabra u oración al realizar el acto de habla".

La noción de performatividad le permitió a la lingüística desarrollar la afirmación según la cual  "decir es hacer" y avanzar en el estudio de los diferentes tipos de actos de habla. Cada acto de habla se constituye por tres actividades que se desarrollan en cada ejecución lingüística.

Dicha ejecución involucra: el acto de decir (acto locutivo o locucionario), el que tiene lugar al decir algo (acto ilocutivo o ilocucionario) y el que ocurre por el hecho de decir algo (acto perlocutivo o perlocucionario).

Acto locutivo es el que tiene como finalidad la pronunciación de sonidos, sílabas, palabras, oraciones de una lengua para referirse a un significado.

Acto ilocutivo es el ejecutado al decir el acto locutivo. Al decir no sólo significamos y proponemos significados y referencias sino también ejecutados acciones como afirmar, preguntar, responder, advertir. El acto ilocutivo se orienta a decir explícitamente cómo la "locución" debe ser interpretada en el contexto de su enunciación.

Acto perlocutivo es el que se desprende del acto de decir; en otras palabras, los efectos y consecuencias extalingüísticas producidas por el hecho de realizar una ilocución: por ejemplo, convencer, sorprender, asustar, obedecer, conmover o aun más, producir un movimiento, una sonrisa o una pena. El acto perlocutivo sería entonces, la suma del acto ilocutivo del hablante más sus efectos en el oyente.

La siguiente gráfica sirve para sintetizar los actos de habla así:

Actos de habla
 

Actos locutivos
Actos ilocutivos
Actos perlocutivos
“Está lloviendo”
Afirmar
Mirar por la ventana, alistar el paraguas, no salir
“¿Está lloviendo?”
Preguntar
Contestar, alistar el paraguas, cerrar la ventana
Por favor, mira si está lloviendo”
Pedir
Levantarse, abrigarse, desentenderse, contestar
“Te voy a castigar”
Amenazar
Impresionar, cambiar de actitud, llorar, disculparse
“Podrías mejorar ese escrito”
Sugerir
 Acatar, negarse, irritarse.
“Vendré mañana”
Prometer
Crear expectativa, esperar, aceptar, despistar


Para la lingüística el aspecto más importante de esta aproximación a lenguaje lo constituyó la ilocución ya que permitió poner de relieve, no sólo la intención comunicativa sino también el efecto pragmático de la interlocución.

Searle propuso la siguiente taxonomía de los actos ilocutivos:
1.  Los asertivos cuya intención es comprometer al locutor, debido a ello, las palabras se ajustan al mundo real y el estado psicológico es la convicción sobre el contenido expresado. Por ejemplo: " Juan llegará mañana".
2. Los directivos cuya intención es que el interlocutor a algo, por ello el mundo debe corresponder a las palabras y el estado psicológico expresa voluntad o deseo. Por ejemplo: " Sálgase"
3. Los promisivos donde la intención es comprometer al interlocutor con el cumplimiento de una acción, por ello el mundo se ajustan las palabras y el estado psicológico es la sinceridad de la intención. Por ejemplo: " Prometo venir".
4. Los expresivos cuya intención es expresar el estado psicológico con la  condición de que haya intención sincera, por ello no hay correspondencia entre el mundo real y las palabras y el contenido atribuye una propiedad ya sea al locutor o al interlocutor. Ejemplo: "Perdóneme".
5. Los declarativos cuya intención es instaurar una realidad en la que la correspondencia entre palabras y mundo real es directa bajo la reserva de legitimidad institucional o social. Por ejemplo: " Le declaro la guerra", “Los declaro marido y mujer” “Queda abierta la sesión”.

BIBLIOGRAFÍA
AKMAJIAN A, Y otros, Lingüística: una introducción al lenguaje y la comunicación, Barcelona, Alianza, 1984BLANCHET P., La Pragmatique, Paris, Bertrand-Lacoste, 1995
LOZANO J. Y otros, Análisis del discurso, Madrid, Cátedra, 1982
MAINGUENEAU D,  L´énonciation en Linguistique Francaise, París, Hachette, 1994.
SEARLE  J., Actos de Habla, Madrid, Cátedra, 1990



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